Pretendemos ver a nuestra institución convertida en un centro de convivencia pacifica, participativa y con una educación de calidad, inspirados en el evangelio, la espiritualidad franciscana y el celo misionero de madre Maria Bernarda Blutter y de esta manera, brindarle a la comunidad, personas dignas y verdaderos lideres para alcanzar un alto nivel de proyección hacia la familia y a la comunidad en general.
